Los azzurri han sufrido tres años de turbulencias desde su emocionante triunfo en Wembley, y llegan a Alemania sin varios hombres clave
Luciano Spalletti sabe que Camisetas de futbol Italia baratas aún no está al mismo nivel que sus rivales de la Eurocopa 2024, Inglaterra, Francia, Alemania, Croacia, España y Portugal. Sin embargo, cree que pueden llegar a estarlo. En su plantilla no hay “cabezas huecas”, dice, sólo jugadores tan comprometidos con la causa que incluso están dispuestos a renunciar a jugar a la PlayStation durante un mes.
En consecuencia, Spalletti está convencido de que cuenta con un grupo de jugadores no sólo con el talento, sino también con la actitud adecuada para emular el sorprendente triunfo de Italia en Wembley hace sólo tres años. “Incluso los Azzurri de Mancini en 2021 no eran los más fuertes sobre el papel”, afirma el seleccionador. “Luego, se convirtieron en un equipo especial”.
Sin embargo, aunque Italia llega de nuevo a una segunda Eurocopa consecutiva tras no haberse clasificado para el Mundial precedente, las similitudes entre los hombres de Mancini y el equipo de Spalletti terminan ahí.
Italia gozaba de una salud de hierro antes de la última Eurocopa. En esta ocasión, se encuentra en una situación de absoluto desorden después de tres años de confusión. Como resultado, la mayoría de los aficionados no sueñan con ganar el torneo, sino que temen una eliminación en primera ronda. Y es que, desde Grecia en 2008, no se había visto a una vigente campeona de Europa acudir a defender su título en tan malas condiciones.
Tras la conmoción y el horror de perderse su primer Mundial desde 1958, Italia disfrutó de un espectacular resurgimiento bajo la batuta de Roberto Mancini que culminó con una gloriosa -y totalmente merecida- victoria sobre Inglaterra en la final de la Eurocopa 2020. El triunfo de la Azzurra fue sin duda una sorpresa, y su forma de jugar lo fue aún más, ya que confundió los estereotipos con un fútbol dinámico y ofensivo.
Sin embargo, no fue precisamente una historia de valientes perdedores. Mucho antes de que Italia llegara a Inglaterra para disputar la semifinal, ya estaba claro que Mancini estaba construyendo algo especial. Ya había conseguido crear un espíritu de club en el seno de la selección, y cabe recordar que su equipo llevaba 27 partidos invicto cuando comenzó la Eurocopa.
Italia llegaría a batir el récord internacional de partidos consecutivos sin conocer la derrota, y era considerada una de las favoritas para ganar el Mundial de 2022. Sin embargo, los azzurri ni siquiera llegaron a Qatar. Después de que dos penaltis fallados por Jorginho le costaran la victoria ante Suiza en la fase de clasificación, Italia fue sorprendida por Macedonia del Norte en la repesca.
Aun así, la dimisión de Mancini en el verano de 2023 -o quizás más exactamente, su momento- dejó atónito al fútbol italiano.
Mancini dimitió el 13 de agosto de 2023, sólo nueve días después de que la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) le otorgara el control de las selecciones sub-20 y sub-21 del país, para permitirle suavizar la progresión de los jugadores desde el fútbol sub-20 hasta la absoluta.
“Es un poco sorprendente”, declaró a LaPresse Renzo Ulivieri, Presidente de la Federación Italiana de Entrenadores. “Nadie se lo esperaba”. Mancini, que asumió inmediatamente el cargo de seleccionador de Arabia Saudí, señaló con el dedo acusador al presidente de la FIGC, Gabriele Gravina.
“Podría haberme mantenido si hubiera querido”, alegó Mancini. “Pero durante un año estuvo intentando revolucionar mi plantilla. Le expliqué que en estos meses necesitaba que me diera apoyo y calma, pero no lo hizo y por eso dimití.”
La repentina salida de Mancini dejó a Italia en un buen aprieto, dado que su campaña de clasificación para la Eurocopa 2024 ya estaba en marcha. Encontrar un sustituto digno no iba a ser fácil. Por suerte, Spalletti estaba dispuesto a abandonar su supuesto sabático del fútbol después de separarse de forma sensacional del Nápoles al final de su histórica conquista del Scudetto la temporada anterior.
En ese sentido, la FIGC no podía haber encontrado un seleccionador más cualificado para suceder a Mancini, y Spalletti no tardó en demostrar su valía colando a Italia en la segunda plaza de su grupo de clasificación. Los Azzurri terminaron empatados a puntos con Ucrania, pero avanzaron gracias a su mejor registro en los enfrentamientos directos, y a un penal muy discutido en el empate de la última jornada contra el equipo de Sergiy Rebrov en Leverkusen.
Sin embargo, los intentos de Spalletti por construir un “equipo especial” a tiempo para la Eurocopa se han visto obstaculizados no sólo por la falta de preparación, sino también por la falta de calidad.
Si bien Italia fue ampliamente elogiada por un planteamiento atípicamente aventurero en la Eurocopa 2020, que sacó lo mejor de Federico Chiesa, su triunfo siguió basándose en la excelencia defensiva.
Leonardo Spinazzola fue una revelación en la banda izquierda, planteando todo tipo de problemas a los rivales hasta que se lesionó contra Bélgica en cuartos de final. La ausencia de Spinazzola limitó el peligro ofensivo de Italia, que se apoyó cada vez más en los veteranos Giorgio Chiellini y Leonardo Bonucci, inmensos contra España e Inglaterra, y en Gigi Donnarumma, elegido mejor jugador del torneo.
Desgraciadamente, Chiellini y Bonucci (los dos miembros restantes de la famosa “BBC”) se han retirado, privando a Spalletti de un caudal de calidad y experiencia. Peor aún, sus ausencias se han visto agravadas por una serie de bajas forzadas por lesión en el departamento defensivo.
No en vano, Italia, un país famoso por sus defensas de talla mundial, estaba bien surtida de centrales antes de la Eurocopa. Sin embargo, la situación es muy distinta ahora, ya que Francesco Acerbi y Giorgio Scalvini se han visto obligados a abandonar el equipo de Spalletti.
Aunque Scalvini se ha convertido en uno de los jóvenes defensas más prometedores de Italia, la ausencia de Acerbi es la que más se notará. El as del Inter, que contribuyó a dejar a Erling Haaland fuera de la final de la Liga de Campeones del año pasado, iba a ser titular junto a su compañero de club Alessandro Bastoni, tanto si Italia jugaba con tres como con cuatro defensas.
Para colmo de males, el lateral de los Camisetas de futbol Tottenham Hotspur niños Destiny Udogie también ha sido descartado, lo que significa que Spalletti no puede permitirse que le ocurra nada a Federico Dimarco, sobre todo porque Spinazzola ni siquiera entró en la lista preliminar, después de haber tenido problemas de forma y de forma física desde la Eurocopa 2020.
Los problemas de lesiones de Italia no se limitan únicamente a la defensa. El otrora brillante Marco Verratti se ha retirado a Qatar, Nicolo Barella aún no se ha recuperado por completo de un problema muscular menor, mientras que Chiesa, el arma ofensiva más potente de la Azzurra con diferencia, no es el mismo talento emocionante que vimos en Wembley hace tres años. Es evidente que jugar a las órdenes de Massimiliano Allegri ha pasado factura al extremo del Juventus, pero también lo ha hecho una sucesión de pequeñas lesiones.
El declive de Chiesa -que Spalletti espera que no sea irreversible- es especialmente problemático, ya que tanto Domenico Berardi como Nicolo Zaniolo se perderán la Eurocopa por lesión, lo que significa que los Azzurri vuelven a estar dolorosamente faltos de opciones en ataque.
